La depilación láser es un método de fotodepilación ideal para eliminar de forma permanente el vello corporal no deseado.
Se realiza mediante un dispositivo que emite descargas de luz. En este caso, la energía lumínica se transforma en energía térmica y penetra en el vello a través cada tallo piloso, calentando las células hasta destruir la matriz, por lo que el pelo se caerá solo y finalmente no podrá regenerarse de nuevo.
Hay que recordar que este proceso ocurre utilizando únicamente el pelo como hilo conductor y sin dañar la piel de los alrededores.
Depilación con láser: Uno de los métodos más efectivos de la actualidad
En relación a esta técnica de depilación, podemos indicar que la luz láser actúa sobre la melanina, que es la sustancia responsable de la coloración del pelo y de la piel.
Este procedimiento de depilación es muy efectivo en personas con la piel clara y el pelo oscuro, ya que presenta una mayor concentración de melanina. Al contrario, pieles muy oscuras y bronceadas, podrían verse afectadas con este tratamiento.
Pero, al final, será la clínica donde se efectúe el tratamiento, la encargada de valorar al paciente sobre la recomendación o no de este método de depilación y de ajustar el tratamiento a su tipo de piel y vello.
Lo más recomendable es rasurarse el día anterior a la primera sesión, ya que se debe aplicar el láser sobre el vello en la fase de crecimiento.
Durante el proceso se aplica un gel sobre la zona a tratar, el cual actúa como conductor de la luz láser que emite el dispositivo.
Cada descarga de luz puede provocar una leve sensación de calor o pinchazo, pero los equipos de depilación láser suelen contar con sistemas de frío que mitigan las molestias.
¿Cuánto dura este tratamiento para ver los resultados?
La duración del tratamiento de depilación láser es muy variada, ya que dependerá de muchos factores: el tipo de piel y de vello, la zona a tratar y la frecuencia de las sesiones.
Partiendo de la base de que cada caso es muy particular, la media de las sesiones necesarias para eliminar completamente el vello, suele ser entre 6 y 8 en total.
No obstante, desde la primera sesión ya se pueden notar los resultados. El vello se caerá y el tiempo en que este tarda en volver a salir, sin duda es mucho mayor que con otros métodos.
Es importante señalar que una vez finalizado el tratamiento y obtenidos los resultados esperados, será necesario realizar sesiones de mantenimiento aproximadamente 1 vez al año, para así eliminar el “vello residual” que pudiera volver a salir.
¿Se pueden depilar zonas con lunares?
Generalmente sí, pero el profesional de la clínica o un dermatólogo deberá ser el encargado de valorar cada caso en concreto, dependiendo del tipo de lunar o mancha que presente el paciente.
La frecuencia lumínica utilizada por el láser en depilación es controlada y normalmente muy segura, con una longitud de onda unidireccional que reduce el riesgo de absorción de la luz en otras zonas de la piel más oscuras.
En los casos en que sea necesario, puede optarse por proteger el lunar con un apósito o pintarlo con un lápiz blanco, para evitar que este absorba la energía.
¿Puedo depilarme con láser de diodo en verano?
Los sistemas de depilación láser han ido evolucionando con el paso del tiempo y el láser de diodo se puede decir que ha disminuido los riesgos, además de los tiempos de espera antes de exponernos a los rayos solares.
Por lo tanto, es posible depilarse con láser en verano, pero siguiendo algunas pautas para que el tratamiento sea más eficaz y para que nuestra piel no se vea resentida.
Lo más recomendable es no tomar el sol en los 7 días anteriores y posteriores a la sesión, tampoco se deben aplicar autobronceadores y, sobre todo, no podemos olvidar el uso de protección solar en cara y cuerpo.